El Resurgimiento de la Identidad Vitivinícola Argentina a través del Inta
Este fenómeno se cristalizará en el V Encuentro de Vinos y Variedades Criollas organizado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), sede Luján de Cuyo.


Las uvas criollas, históricamente relegadas frente a las variedades internacionales, están viviendo un notable resurgimiento en Argentina. Impulsadas por la investigación científica y el creciente interés de la industria en la diferenciación, estas variedades ancestrales ganan terreno y demuestran un prometedor potencial enológico. Este fenómeno se cristalizará en el V Encuentro de Vinos y Variedades Criollas organizado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), sede Luján de Cuyo.
El Rol Estratégico del INTA en la Valorización | El programa de investigación del INTA Mendoza, activo desde 2011, ha sido fundamental en el proceso de recuperación y valorización de las variedades autóctonas. Utilizando herramientas de análisis molecular (estudio de ADN), los investigadores lograron identificar un grupo de 40 variedades criollas, de las cuales 28 resultaron ser genotipos no conocidos o poco estudiados.
Este trabajo no solo permitió conocer el origen genético y los posibles progenitores de estas cepas (incluyendo algunas conocidas como Cereza, Criolla Grande y Torrontés Riojano), sino que también culminó en la implantación de una colección de 60 variedades criollas en el campo experimental. El objetivo es preservar este valioso germoplasma y continuar con los ensayos enológicos.
"Mediante la evaluación de sus características vitícolas y la elaboración experimental de vinos, hemos confirmado que por su composición polifenólica, perfil aromático y acidez, muchas de estas variedades minoritarias poseen un potencial enológico de alta calidad," explicó el ingeniero agrónomo e investigador Jorge Prieto.
Variedades Criollas: Una Realidad de Mercado | Lejos de ser una tendencia marginal, las uvas criollas representan un segmento significativo del terroir nacional. En la actualidad, aproximadamente el 25% de la superficie cultivada con vid en Argentina corresponde a variedades criollas.
Si bien el grueso del mercado sigue siendo dominado por las cepas internacionales (francesas, españolas e italianas), existe un creciente interés en la industria por diversificar la oferta con vinos de identidad propia. Este interés se traduce en números concretos:
Expansión de la Oferta: Inicialmente impulsados por pequeños y medianos productores, hoy en día grandes bodegas están incorporando exitosamente una o dos etiquetas de vino criollo a sus portafolios, respondiendo a una demanda creciente por parte del consumidor.
Crecimiento del Evento: La relevancia de estas variedades se mide en la evolución del encuentro del INTA: en su primera edición (2017) contó con la participación de 20 productores, mientras que la edición anterior (2023) convocó a 100 productores y 20 bodegas, un claro indicador del auge sectorial.
V Encuentro INTA: Agenda Técnica y Comercial | El V Encuentro de Vinos y Variedades Criollas, organizado conjuntamente por el INTA y una asociación de productores en formación, se celebrará el 20 de noviembre de 2025 en la Bodega Experimental de la EEA INTA en Luján de Cuyo, Mendoza.
El evento se estructura en dos momentos clave:
Seminario Técnico (15:00 a 18:00 hs): Orientado a profesionales y técnicos, presentará los avances de las investigaciones en caracterización y ensayos enológicos. Incluirá una degustación exclusiva de vinos experimentales elaborados con variedades criollas minoritarias provenientes de distintas parcelas de Mendoza.
Feria de Vinos Comerciales (18:00 a 22:00 hs): Abierta a todo público, contará con la participación de unas 30 bodegas de todo el país que exhibirán y ofrecerán sus vinos de variedades criollas.
Este evento no solo actúa como plataforma de difusión científica, sino que consolida la categoría del vino criollo como un activo estratégico para la diferenciación y la competitividad de la vitivinicultura argentina en el escenario global.


