El vino en escena

Nos tomamos el atrevimiento de publicar o republicar un nuevo fragmento de un texto de Rodolfo Bracelli y el amor infinito del vino como buen mendocino.

Mendoza es la capital del vino en Argentina y una de las regiones más prestigiosas del mundo. Con más de 140.000 hectáreas de viñedos y 600 bodegas, produce el 70% del vino argentino y es reconocida internacionalmente por la calidad de sus tintos, en especial el Malbec.

Por ello, hoy que arranca la última etapa (o, mejor dicho, la etapa más simbólica) de los actos vendimiales, desde el equipo de Prensa de Copgrem, queremos proponer las palabras del brillante escritor Rodolfo Braceli quien (como buen mendocino) habla de este tiempo y del vino...A disfrutar de una muy buena lectura.

Posdata, entre brindi y brindi | Por: Rodolfo Bracelli

No se nos olvide que el vino es una patria sin puertas con las puertas abiertas; con la intemperie entera por techo.

Una patria para los que tienen las manos limpias porque no se lavan las manos.

El vino es la patria de los que no besan de la boca para afuera, de los que se arrojan de cabeza en cada beso.

El vino es la más intensa casa, la que cobija el entusiasmo de la cebolla, la emoción de la albahaca, la ternura del orégano, la sinceridad del ajo.

El vino, más luminoso cuanto más oscuro, como lo hondísima mujer.

El vino, el abecedario de todas las letras habidas y por haber.

En tiempos de confundidos y de distraídos tengamos muy presente que el entrañable vino es la única patria que tiene mástiles para todas las banderas. Para todas.