Entre un viernes de reclamos y una carta que muestra nuestro compromiso

Sturzenegger se llevó reclamos y nuestra posición sobre las medidas tomadas en el INV.

Los Tres Pilares de Control en Revisión | El núcleo de los reclamos del sector vitivinícola giró en torno a la decisión de la Resolución 37/2025 de transformar en opcionales una serie de certificados que históricamente fueron obligatorios para asegurar la trazabilidad del vino. Sturzenegger se comprometió a analizar en Buenos Aires las objeciones presentadas por productores y provincias, que se centraron en:

  • Certificado de Ingreso de Uvas (CIU): El sector teme que su voluntariedad complique el registro del origen de la uva y la trazabilidad del producto.

  • Control del tenor de azúcar: Se solicitó sostener su obligatoriedad como verificación técnica esencial para resguardar los parámetros de calidad del vino.

  • Certificado final de bodega: Existe inquietud sobre si la flexibilización de este documento podría generar vacíos en la información del tramo final del proceso productivo.

  • Si bien el ministro de Desregulación defendió la medida aclarando que "no es que se eliminen: pasan a ser opcionales" y que el 98% de las medidas cuenta con consenso, aceptó la masividad del pedido de revisión técnica sobre estos puntos.

El Fuerte Reclamo de los Enólogos: Cuestión de Competencia Profesional | El comunicado de nuestro Consejo en conjunto con otros Concejos puso el foco en un conflicto de incumbencias profesionales que, sostienen, pone en riesgo la identidad técnica y cultural del vino argentino.

Los profesionales manifestaron su "profundo malestar" ante la incorporación de ingenieros químicos y en alimentos como nuevos profesionales habilitados para la responsabilidad técnica en bodegas. Los enólogos argumentaron que su formación va más allá de los conocimientos químicos, abarcando aspectos vitivinícolas específicos como:

  • La interpretación de terroir.

  • La gestión de fermentaciones y la crianza.

  • El perfil sensorial de las uvas, el mosto y el vino.

Los profesionales de la Enología consideran que la ampliación de incumbencias, realizada sin una evaluación técnica previa y sin consulta a los colegios profesionales, podría "degradar el rol profesional histórico" y afectar la calidad del producto.

Derogación de Registros Obligatorios | Otro punto de crítica del sector profesional es la derogación de la Res. C-127/1993 (creación del Registro Nacional de Profesionales de la Enología) y la Res. C-11/2018 (que exigía la matriculación de los enólogos responsables en los establecimientos vitivinícolas).

Los Consejos señalan que estas resoluciones estaban en armonía con el Artículo 39 de la Ley General de Vinos Nº 14.878, que exige que las elaboraciones se hagan bajo la "responsabilidad directa y efectiva de un técnico, capacitado por título habilitante en la actividad de que se trata".

La eliminación de estas normativas y el reconocimiento de incumbencia a nuevos títulos habilitantes generan "sorpresa, desconcierto y sobre todo preocupación" a los Consejos profesionales, que solicitan la revisión de las resoluciones derogadas y la convocatoria a los colegios para revisar las disposiciones.

La Respuesta del Gobierno: "Cuerpo Vivo en Revisión" | A pesar de la firmeza en la defensa de la desregulación, Sturzenegger reconoció la validez de los planteos recibidos. El ministro enfatizó que "una desregulación es un cuerpo vivo, siempre está en proceso de revisión permanente".

El gobierno, según el Ministro Nacional, reafirma su compromiso con "dar más libertad para producir, cosechar y comercializar", pero se lleva a Buenos Aires las observaciones técnicas para analizarlas en profundidad, especialmente aquellas referidas a la obligatoriedad de los certificados clave para mantener la trazabilidad del vino argentino.

Ahora, veremos que sucede en los próximos días.