Un vino con sabor a esfuerzo y valentía

Hoy vuelve a surgir la historia de los sobrevivientes de la tragedia aérea de los Andes ocurrida hace más de 40 años. Uno de esos sobrevivientes, Nando Parrado creo un vino en Mendoza en honor a su padre.

La vida Fernando “Nando” Parrado cambió de la noche a la mañana luego del trágico accidente que sufrió junto a sus compañeros en la cordillera de los Andes. No sólo que ese accidente generó miles de titulares, historias y hasta debates por todo lo sucedido sino que para él fue un antes y un después que lo marcó a fuego porque allí perdió a su madre y hermana en dicho episodio.

Sin embargo y pese a esto y todo lo vivido durante los 72 días en la montaña, el uruguayo se aferró a la vida y para honrar a su padre creó un vino en Mendoza.

“Este proyecto honra el fuerte vínculo entre Nando y su padre Seler Parrado a través del disfrute, de la celebración, del compartir… del vino”, se lee en el sitio de Nando Parrado Wines al presentar el trabajo que se realiza en Argentina. A su vez, el también ex corredor de autos, recalca: "es «un vino que nace en la hostilidad de un terruño muy especial, que sabe de contrariedades, de tiempo y de esfuerzo, para transmutar en elegancia y armonía».

En las redes sociales, el empresario destacó que «cada botella de vino es un homenaje a mi padre, Seler Parrado, y gracias a Matías, viticultor de NPW, su legado perdura en cada sorbo»

La vida de Nando Parrado tras la tragedia de Los Andes | Fernando Parrado es uno de los supervivientes más mediático. Parrado perdió a su madre, Zenia Dolgay, y su hermana, Susana en el accidente, por lo que tuvo una de las historias más duras, no solo durante los 72 días en la montaña, sino al regresar a su casa y afrontar su nueva realidad.

Luego del accidente, Fernando Parrado dejó sus estudios y comenzó a trabajar en la empresa familiar, una cadena de ferreterías. Años más tarde, se dedicó al automovilismo y se convirtió en piloto. Posteriormente, dedicó su vida a ser presentador y productor de televisión.

Este proyecto hace que la historia de supervivencia del uruguayo y sus compañeros, perduren para siempre en esta particular etiqueta de vino.